Cuando el Seminario Nazareno de las Américas (SENDAS) se sometió a una reforma curricular para el programa de su bachillerato en 2020, agregaron un curso sobre la Teología de las Mujeres en el Ministerio. En sus primeras implementaciones, hizo un impacto significativo en las vidas de aquellos que tomaron el curso.
Este tema ha venido a destruir muros, dijo Ramón Galdamez, un participante de California. Es una bomba para aquellos que leen la Biblia desde una perspectiva masculina.
El curso se enseñó por primera vez a dos clases diferentes durante el trimestre de enero a marzo. Los cursos se llevaron a cabo a través de Zoom con los instructores Elvin Heredia de Puerto Rico y Mónica Mastronardi de Costa Rica, que desarrolló el nuevo syllabus.
Ha sido un privilegio y un desafío para mí enseñar la Teología de las Mujeres en el curso de Ministerio, dijo Mastronardi. Hemos estudiado los fundamentos Wesleyanos, bíblicos y teológicos de la mutualidad de género y la igualdad en los que John Wesley y los fundadores y fundadores de la Iglesia de la Nazarena creían y practicaron. Nos queda con el gran desafío de alentar a las mujeres a superar sus miedos y ayudar a nuestros líderes a identificar el chauvinismo visible e invisible que ha permeado las creencias y prácticas de muchos cristianos.
El material base del curso, traducido al español por Mario Zani y su esposa, Ana María, fue proporcionado por Roberto Hodgson, director de Ministerios Multiculturales para los Estados Unidos y la Región de Canadá. Este material fue expandido y complementado por SENDAS.
Este módulo ha cambiado mi mentalidad, dijo Luis Chafla. La actitud chauvinista en mi corazón ha sido eliminada. Ahora puedo tener un nuevo comienzo, pero esta vez puedo hacerlo de la manera correcta, siguiendo la verdad. He aprendido a interpretar la Palabra de una manera mejor, ya no dejando que la mentalidad cultural predominante me guíe.
Al curso asistieron un total de 39 estudiantes, 22 mujeres y 17 hombres, de los distritos del Norte de California, Nueva Inglaterra y Nueva York.
La mayoría de la comunidad que servimos es hispana, y dentro de esta cultura hay mucho chauvinismo donde las mujeres son tratadas como inferiores debido a la ignorancia, tanto dentro de la iglesia como fuera, dijo Ermunda Hidalgo. Mi deber es ayudarlos a encontrar su verdadero valor en Dios, que Dios no los creó o los vio como seres humanos inferiores sino que en los ojos de nuestro Padre, los hombres y las mujeres tienen el mismo valor y las mismas capacidades.
