La Región de Mesoamérica celebró un hito histórico organizando el nuevo Distrito de Cuba Centro, con base en la provincia de Santa Clara. Este distrito se ha formado con 21 iglesias organizadas, dos misiones de tipo de iglesia (CTM) y seis misiones en la formación, que están casi listas para convertirse en misiones de tipo de iglesia, marcando un avance significativo en la estructura organizativa de la iglesia en la isla.
Durante el evento, Beatriz Reyes Silvente fue elegida como superintendente, convirtiéndose en la primera mujer en mantener esta posición en Cuba.
Es una líder extraordinaria en la iglesia cubana, dijo Carlos De la Cruz, coordinador de estrategia para el Campo Central.
Este momento fortalece el liderazgo de las mujeres en la Iglesia de la Nazarena, y Silvente se une a otras tres superintendentes femeninas en la región. La ceremonia de inauguración se celebró el 25 de enero, y se eligieron líderes adicionales para los varios ministerios de distrito para garantizar un liderazgo fuerte y el apoyo integral para las comunidades locales.
El liderazgo del Superintendente Leonel López en el Distrito Occidental ha sido clave para la visión y la implementación de este nuevo distrito. La expansión de la iglesia en Cuba continúa sin cesar, ya que la organización de un nuevo distrito se proyecta para 2030, reafirmando el compromiso de la iglesia con el crecimiento y la evangelización.
Una mujer de fe y Misión
Quiero expresar mi gratitud y honrar a Dios todos los días, dijo Silvente. Aprendí en las mayores tribulaciones que Dios es suficiente, que siempre estará presente, que sostiene todo con el poder de su Palabra, que soy simplemente un recipiente para su gloria, y me regocijo en saber que su Espíritu Santo vive dentro de mí.
Beatriz Reyes Silvente conoció al Señor en 1993 a la edad de 23 en la iglesia pastoreada por Amelio Palmero en Guantánamo. Desde su conversión, sintió una fuerte llamada al ministerio, sirviendo durante nueve años como presidenta del ministerio de Misiones Nazarenas Internacionales en su distrito.
Su pasión y dedicación la llevaron a ser enviada como misionera a la comunidad de Cidra durante tres meses, que más tarde resultó en su selección como pastora de la iglesia local; sirvió allí durante 12 años.
En 2014, Silvente fue enviada a Santa Clara para pastorear la iglesia madre y representar a la provincia, un papel que ha tenido durante los últimos 10 años. Su liderazgo ha resultado en la plantación de cinco nuevas iglesias en la región central de Cuba, donde el nuevo distrito ahora ha sido organizado.
Casada con Hermesindo Rodríguez Gámez durante 38 años, Silvente ha contado con el apoyo incondicional de su esposo durante todo su viaje ministerial. Juntos, han formado una hermosa familia con dos hijos.
Iglesia de la Región Nazarena de Mesoamérica